Con distintas intervenciones, Punta del Este y todo el departamento de Maldonado esta más renovado que nunca.
“Misión cumplida”, afirmó el Intendente del Departamento de Maldonado, Enrique Antía. Y agregó: “Lo que prometimos para estos años de gestión, lo cumplimos. Estamos diseñando Maldonado para que sea el tractor turístico de Uruguay. Nuestro objetivo es potenciar la naturaleza”. Una de las decisiones políticas de la gestión Antía fue enfocarse en poner en valor la península esteña y el Departamento de Maldonado en general. El objetivo fue y sigue siendo captar nuevos inversores en el sector de la construcción, sin poner en peligro el medio ambiente. Con la naturaleza como prioridad, se intentó robustecer Punta del Este en todos los niveles: desde presentar una ciudad cada día más cuidada hasta lograr exoneraciones tributarias que vuelvan atractiva la zona para las nuevas inversiones.
La ciudad sigue creciendo e invirtiendo en nuevas obras, Punta del Este aparece como una alternativa única en el Cono Sur, una apuesta segura. El objetivo es crecer sin perder la identidad. Convertirse en un balneario exclusivo pero de puertas abiertas.
La historia, presente
Entre los espacios públicos puestos en valor durante estos años, se encuentran el Pueblo Gaucho, la pista de ciclismo, el Parque Indígena que fue renovado y el Parque El Placer. Uno de los artífices de las mejoras en el Pueblo Gaucho fue Juan Carlos López: “Alguna vez fue un proyecto, hoy es una realidad. Y una realidad necesaria porque América del Sur debía tener un pueblo gaucho como los hay Aztecas o Mayas. Y debía estar ubicado, como está, cerca del buque insignia del turismo nacional que es Punta de Este”. Para López, el Pueblo Gaucho “debe ser un referente para millones de habitantes de la cuenca gaucha de América del Sur y coloca a Uruguay en el centro del mundo gaucho iberoamericano”.
A la zona aledaña al puente de La Barra también le espera una importante reforma, el proyecto Zona Joven. Allí se construirá un espacio que tendrá un polo gastronómico, locales de música, un anfiteatro natural y estacionamientos. Además, se se realizarán ciclovías y pasarelas para poder disfrutar del lugar.
Pero, mientras mira al futuro, la nueva Punta del Este quiere recuperar su pasado. Por eso, se busca preservar el patrimonio y poner en valor los edificios históricos del Departamento. La Torre del Vigía, el Molino Velázquez, el Museo Mazzoni, la Isla Gorriti, la Azotea de Haedo, entre otros, fueron rescatados del olvido y reciclados. En carpeta quedan potenciar el Arboreto Lussich y el Castillo de Piria.
La Torre del Vigía, construida entre 1799 y 1800 por orden del Virrey del Río de la Plata Gabriel de Avilés y Fierro, tenía como finalidad vigilar y observar todo lo que ocurría en el mar: la posible llegada de naves enemigas o de piratas. El Molino Velázquez, ubicado dentro del predio de la escuela Número 7 y los elementos icónicos de la Isla Gorriti como las baterías, las cureñas y los cañones fueron restaurados.
Así como también la batería del Medio o de Jesús, emplazada en la Parada 16 de Playa Mansa.
Los responsables de estas gestiones son Jorge Céspedes, Director General de Cultura de la Intendencia de Maldonado y Fernando Cairo, Subdirector de la Dirección de Cultura de la Intendencia de Maldonado. “Cumplimos con el objetivo que el gobierno se propuso en el inicio de su gestión: recuperar el patrimonio departamental porque de ese patrimonio se nutren las raíces de nuestra propia identidad como comunidad”, afirma Céspedes. Y agrega: “Esa fue la consigna sobre la que trabajamos y sobre la que seguimos trabajando. En estos cuatro años largos de gestión, mantuvimos la promesa de recuperar el patrimonio. Queda mucho por hacer pero hicimos muchísimo. Además, este es un objetivo de gobierno que trasciende una gestión de cinco años porque es generacional. En cuestiones de patrimonio se es un simple depositario de lo hecho. Y la obligación es transferirlo de la mejor manera posible porque lo estamos preservando para las próximas generaciones. No existe un presente en la preservación, existe un futuro y ese futuro depende del compromiso de todos los días”.
El retorno de Aiguá
Entre las recuperaciones de patrimonio más importantes se cuenta el proyecto de Fachadas Patrimoniales de Aiguá. La profesora Liliana Bernárdez está a cargo de esta tarea titánica que busca restaurar y valorizarlas.
El proyecto tiene como objetivo restaurar el aspecto de un centenar de casas construidas en la primera mitad del siglo XX. Estas propiedades son consideradas patrimonio representativo del país. Para Bernárdez, “darles puesta en valor al patrimonio, es el más alto objetivo que se puede tener en lo cultural. En los primeros años del siglo pasado, Aiguá era el centro de una próspera región de alta producción agropecuaria. Bernárdez explicó que la memoria de quienes viven actualmente en Aiguá va de la mano con esta iniciativa. “Los aigüenses están orgullosos de su patrimonio arquitectónico”, señala. La primera recuperación fue hecha en la fachada de la Capilla San Antonio y los vecinos de mayor edad recordaban los tiempos de esplendor del edificio con mucho cariño. “Estar orgulloso del entorno hace feliz a la gente y yo creo que ese es otro objetivo de este proyecto”, agrega Bernárdez.
Además de poner en valor estas magníficas residencias, un objetivo paralelo es atraer turismo a esta ciudad, que se encuentra a 90 kilómetros de Punta del Este. Ya hay, organizado por los vecinos, un tour turístico en bicicleta para conocer las casas renovadas. El proyecto Fachadas tiene, en su primera etapa, la misión de restaurar al menos 100 más.
Aiguá tiene la misión de restaurar 100 fachadas. Comenzó en agosto de 2017 y ya terminaron 47.
El espacios de todos
El espacio público fue también un objetivo prioritario. Y una de las primeras obras de la gestión fue poner en valor el Parque El Jagüel y sus zonas de influencia. Por eso, lo mismo que en las Plazas Mancebo y México, se plantaron aloes y flores, se mejoró las condiciones de las zonas verdes y se instaló un alumbrado moderno.
Este ambicioso programa sustentable también incluyó la remodelación de la Rambla de la Mansa en la Parada 12 y el Paseo las Américas, con la recuperación de esculturas que forman parte de la historia y del patrimonio de la ciudad. “Tenemos un plan de rescate del espacio público, no sólo para embellecerlo sino también para incorporarlo a la vida cotidiana de la ciudad. Por eso pusimos en valor el Paseo de las Américas, que es un patrimonio millonario de la ciudad, y El Jagüel, entre otros sitios. Queremos recuperar el brillo y la memoria de Punta del Este y generar convivencia ciudadana. Nuestro trabajo es que la ciudad tenga una lectura homogénea: darle calidad de vida a quienes nos visitan y también a quienes viven acá”, afirma Rubén Pérez, Director de Espacios Públicos de la Intendencia.
Tránsito ordenado
“Las cámaras de seguridad también han servido, junto con las obras que hemos realizado, para ordenar el tránsito. Pero no se trata de incriminar al conductor, sino de prevenir infracciones y accidentes. Menos multas al turista y mayor prevención e información”, aseguran en la Intendencia.
Las obras de la Rotonda España y Avenida Roosevelt, el nuevo sistema implementado para el tránsito en el Sanatorio Cantegril, las mejoras en Roosevelt y la Rambla, la Rotonda en la entrada de Maldonado, en Avenida Artigas y Camino Vialidad, forman parte de las nuevas obras.
También fueron importantes los trabajos realizados en la entrada a José Ignacio, tanto en la ruta como en los nuevos estacionamientos. Así como la obra en la perimetral y en la nueva avenida antes del puente de La Barra. Estas mejoras en el tránsito de Maldonado y, en especial, de Punta del Este, permiten formas más sencillas de conocer la ciudad y no sufrir estrés en las horas pico, tanto a la mañana como al atardecer.
De vides y de olivos
“Adentrarse en esta zona de vides y olivos es embarcarse en un viaje inolvidable porque se recorre parte de Uruguay pero también se está vivenciando parte del mundo, con las reminiscencias de aquellos países de donde provienen los cepajes originales de los vinos, y las variedades de las aceitunas”. Así explica Luís Barragán la Ruta de la Vid y los Olivos.
Sucede que, en las últimas décadas, la pasión ancestral por los vinos y los aceites de oliva desembarcó en la Región Este de Uruguay, lo que se le llama, El Arco del Sol. Aventurarse en el conocimiento de estos cultivos milenarios es un placer en sí mismo. Desde el proceso de elaboración hasta los principios de cata, disfrutando también del arte, de la historia, de la cultura y de la naturaleza. Durante este recorrido por el camino del vino y de los olivos se tiene la oportunidad de saborear excelentes productos acompañados de platos dignos de una gastronomía tradicional, creativa y distinguida, en el entorno de un paisaje magnífico. El paseo por la Región Este es un proyecto que nos lleva al disfrute pleno y a reencontrarnos con la naturaleza y con los más exquisitos placeres gourmet.
Una nueva invitación, una nueva excusa, para vivir y sentir el Departamento de Maldonado.