El aspecto físico que uno desea a veces se logra con esfuerzo.
Y, muchas otras veces, con ayuda de un profesional de la estética. Por eso es fundamental la manera de trabajar y los pergaminos de un cirujano plástico. La buena relación entre paciente y cirujano es materia de primer orden, a la hora de someterse a un intervención quirúrgica. Así como también el trabajo previo a la operación, donde se decide lo que se busca y cómo conseguirlo. Como suele ocurrir en varios órdenes de la vida, una buena elección anticipada, supone un éxito al final del camino.
La importancia de trasmitir una buena imagen física forma parte de la lógica moderna. Verse bien, en estos tiempos de altísima exposición, es casi imprescindible. Y ese buen aspecto físico se puede potenciar aún más con el cirujano plástico, además del trabajo del gimnasio o los regímenes saludables y nutricionales que se sigan. Por eso, en ocasiones, es fundamental encontrar un médico de confianza en el plano estético. Una tarea no sencilla. Debemos ser muy cuidadosos con este tipo de elecciones, para no padecer más tarde una práctica desafortunada.
El doctor Juan Carlos Elías tiene de una de las prestigiosas clínicas de cirugía estética de Buenos Aires. Ubicada en Palermo -Juan Francisco Seguí 3592-, esta institución realiza a conciencia su trabajo y también -quizás más importante- aconseja y acompaña al paciente antes de la intervención. “Los logros en la cirugía plástica se nutren del talento individual. El cirujano es un escultor que debe conjugar los deseos con la realidad estética, preservando la fisonomía natural”, afirma Elías.
“La cirugía plástica es el arte de moldear o modelar los distintos tejidos del cuerpo humano”
Allí es cuando el equipo del doctor Elías comienza el trabajo de aconsejar: no siempre es fácil conformar a todos en sus pedidos y, en ocasiones, esos pedidos van en contra de las reales posibilidades de intervención.
La clínica de Elías es visitada por pacientes de Europa, Estados Unidos y Latinoamérica. Goza de un enorme prestigio internacional en el mundo académico y entre sus colegas. Actualmente, los pacientes suelen llegar con mucha información que obtienen vía web y por experiencias de personas cercanas.
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“La belleza, desde su concepción misma, se trata de una apreciación subjetiva. Es decir, lo que es bello para uno, puede no serlo para otro”, dice el cirujano y agrega: “lo atractivo y muchas veces deseable de un cuerpo o un rostro está estrechamente vinculado a dos conceptos inobjetables de la estética: la armonía y las proporciones”.
En este arduo trabajo que supone encontrar la armonía y las proporciones, la clínica de Elías propone no sólo intervenciones quirúrgicas sino también otros caminos menos invasivos como toxina botulínica (botox), radiofrecuencia, láser, plasma rico en plaquetas, entre otros muchos tratamientos. Porque lo fundamental es que el paciente se encuentre satisfecho.
Juan F. Seguí 3592, Buenos Aires