Humedales: el latido oculto de la naturaleza y su llamado a la protección

Bajo el cielo de Punta del Este, donde la tierra se encuentra con el agua, los humedales susurran historias de equilibrio y vida. Son guardianes silenciosos que regulan las aguas, refugio de aves errantes y protectores de la biodiversidad. Sin embargo, su fragilidad enfrenta el avance del desarrollo y la indiferencia humana. ¿Podremos escuchar su llamado antes de que sea demasiado tarde?
Gonzalo Millacet, técnico en ecoturismo e integrante del COA (Club de Observadores de Aves) Punta del Este, junto al geógrafo y educador ambiental Pablo Rubens Faget, brindaron una charla en la Liga de Fomento de Punta del Este sobre la importancia de los humedales.

En su exposición, destacaron el rol fundamental de estos ecosistemas en la regulación de los ciclos del agua en la región, la conservación de la flora y fauna, y su influencia en la estabilidad de las playas en las desembocaduras de ríos y arroyos.
Dichos ecosistemas son esenciales para la vida y el equilibrio ambiental. En Maldonado, el humedal del Arroyo Maldonado cumple una función clave en la regulación del agua, la preservación de la biodiversidad y el bienestar de la comunidad. Sin embargo, a pesar de su enorme aporte, su protección sigue siendo un desafío.
Un regulador natural del agua
El humedal del Arroyo Maldonado actúa como una barrera natural frente a las inundaciones, absorbiendo y regulando los caudales de agua. Este ecosistema retiene el exceso de lluvia y lo libera lentamente, evitando crecidas que podrían afectar a viviendas e infraestructuras.

De acuerdo con expertos en hidrología, en épocas de lluvias intensas, el agua puede alcanzar hasta 4 metros de altura en algunas zonas. Si estos humedales desaparecieran o fueran alterados, las consecuencias serían graves: un aumento en las inundaciones, la pérdida de hábitats naturales y una mayor contaminación del agua que desemboca en el océano.

Además, el humedal contribuye a la recarga de acuíferos, permitiendo que el agua se filtre de manera natural en el subsuelo y abastezca reservas de agua dulce, un recurso cada vez más valioso.
Refugio de biodiversidad
Este ecosistema alberga una gran variedad de especies de flora y fauna, muchas de ellas endémicas o en riesgo de desaparición. Las aves migratorias encuentran en estos humedales un punto de descanso y alimentación, lo que los convierte en un sitio de gran importancia para la conservación de especies.


Los humedales también favorecen la presencia de peces, anfibios y microorganismos que contribuyen al equilibrio ecológico. La desaparición de estos hábitats impactaría directamente en la fauna local, reduciendo la productividad pesquera y la riqueza natural del departamento de Maldonado.
Un servicio ambiental y cultural
Más allá de su rol ecológico, el humedal del Arroyo Maldonado tiene un valor cultural significativo. Muchas personas se identifican con este entorno, considerándolo parte de su historia y su vida cotidiana. “Ese es mi arroyo”, dicen algunos, reflejando el vínculo emocional que existe con este paisaje natural.

Además, el humedal filtra contaminantes y mejora la calidad del agua que fluye hacia el océano. Sin su presencia, los desechos urbanos, los residuos industriales y las sustancias químicas llegarían sin control a los cursos de agua, afectando la salud del ecosistema costero, la calidad las playas de Punta del Este y la salud de quienes disfrutan de las playas de la zona.
La riqueza de las aves y sus hábitats en Uruguay
Uruguay es un país de gran diversidad ecológica, y su geografía variada proporciona múltiples hábitats para una gran cantidad de especies de aves. Desde las praderas y pastizales de la zona pampeana hasta los montes ribereños y los palmares de Rocha y Paysandú, cada ecosistema alberga especies particulares que encuentran en estos ambientes el refugio ideal para su supervivencia.

Los ríos Uruguay, Paraná y de la Plata, junto con la influencia del océano Atlántico, crean corredores naturales por los que transitan aves migratorias, especialmente en invierno. En la zona de Paso Centurión, en el río Yaguarón, se han registrado especies que solo se encuentran en esta región, resaltando la importancia de estos espacios en la conservación de la biodiversidad.


Las quebradas del norte y la Cuchilla Grande también desempeñan un papel clave, al igual que los bañados del Este, un sitio Ramsar reconocido como reserva de biodiversidad. Las lagunas costeras, que descienden desde Brasil, representan otro ecosistema fundamental en la preservación de numerosas especies de aves.
A pesar de su riqueza natural, Uruguay no cuenta con especies de aves endémicas, ya que su geografía sin barreras montañosas permite la libre movilidad de las aves entre países vecinos. Sin embargo, el país es hogar de especies de distribución restringida y en riesgo, como el capuchino pecho blanco y el espartillero enano, que pueden ser observados en el humedal del Arroyo Maldonado.

En total, Uruguay cuenta con 22 áreas clave para la conservación de aves y biodiversidad, según la organización BirdLife International y la ONG Aves Uruguay. La presencia de especies amenazadas o de distribución limitada hace que la protección de estos ecosistemas sea una prioridad para garantizar el equilibrio ambiental y la permanencia de estas aves en nuestro territorio.
El desafío de la conservación
Uruguay es parte de la Convención Ramsar, que protege humedales a nivel global. Sin embargo, la protección de estos ecosistemas en el país sigue siendo insuficiente. A pesar de RAMSAR contar con más de 2.500 humedales registrados a nivel mundial, Maldonado aún no ha logrado consolidar su reconocimiento dentro de esta red.


La expansión urbana sin planificación y la contaminación son amenazas constantes. Sin una gestión adecuada, el humedal del Arroyo Maldonado podría perder su capacidad de regulación y filtración, afectando la vida de quienes dependen de él.

Necesitamos una administración pública comprometida con la sostenibilidad, que priorice el cuidado de estas especies, las cuales comparten su estancia con otros países debido a sus rutas de migración. Esto requiere una coordinación con diversas organizaciones internacionales que trabajan por la preservación de sus propios ecosistemas, garantizando así un equilibrio ambiental a nivel global.

Un compromiso con el futuro
El humedal del Arroyo Maldonado es mucho más que un paisaje; es un ecosistema esencial que resguarda el agua, la biodiversidad y el bienestar de la comunidad. Su valor es inmenso y su conservación representa una gran oportunidad para asegurar un futuro sostenible. Cada acción cuenta y está en nuestras manos protegerlo hoy para que continúe brindando sus beneficios a las generaciones venideras. Cuidarlo es apostar por un entorno más equilibrado y saludable para todos.
