Especial para Punta del Este Internacional desde Washington – Marisol Nicoletti
La importancia en las relaciones internacionales y del financiamiento para el desarrollo se torna más relevante en el actual escenario internacional. La debida cobertura de las necesidades fiscales, de mejor infraestructura y de crédito para el sector privado que organismos como el FMI, el BID o el Banco Mundial ofrecen son hoy tan relevantes para el desarrollo de Uruguay como la seguridad jurídica, la responsabilidad sanitaria o las condiciones tributarias con que el país atrae nuevos residentes e inversiones. Punta del Este Internacional estuvo en Washington DC, donde estos organismos tienen su sede, conociendo in situ cómo los representantes de Uruguay en esos organismos defienden los intereses del país allí. La embajada uruguaya en Estados Unidos, punto clave y obligado dentro de este esquema.
Una de las claves que han contribuido al prestigio de Uruguay y la confianza de inversores es la seriedad y continuidad de su posicionamiento e inserción internacional. Una parte central de las partidas de ese juego se desarrollan en una sola gran ciudad: Washington DC.
La capital de Estados Unidos no sólo es la sede de gobierno de la principal potencia mundial, sino también el lugar donde tienen sus oficinas centrales varios de los principales organismos internacionales, tales como el Fondo Monetario Internacional, la Organización de los Estados Americanos, el Banco Mundial o el Banco Interamericano de Desarrollo, entre otros.
Relaciones que crean futuro
Hoy, en medio de una crítica situación global causado por la pandemia de coronavirus, la representación de Uruguay en esos organismos cobra especial valor. Los recursos para garantizar adecuado financiamiento tanto para el sector público como el privado y la atracción de inversiones productivas o nuevos mercados para nuestras exportaciones, tiene mucho que ver con la calidad y efectividad del desempeño de quienes defienden los intereses de Uruguay en Washington.
Durante varias semanas, Punta del Este Internacional siguió su tarea in-situ y pudo comprobar cómo la tarea de la Embajada o los directores en el FMI; el BID o el Banco Mundial contribuyen a mantener en alto aquel prestigio y aquella confianza ganados a través de los años, y abren nuevas oportunidades para el desarrollo sostenible de Uruguay desde esas responsabilidades.
El BID es una organización financiera internacional que fue creada en 1959 con el propósito de financiar proyectos viables de desarrollo económico, social e institucional y promover la integración comercial regional en el área de América Latina y el Caribe.
Esta organización tuvo un presidente uruguayo entre los años 1988 y 2005, Enrique V. Iglesias, gestor de una amplia gama de proyectos para la región y el país desde el organismo.
Actualmente, el BID Uruguay es representado en su Directorio Ejecutivo por Santiago Cat Ruprecht. El Director de Uruguay en el Banco Mundial hasta el 31 de octubre 2020 es Adrián Fernández, y el Director del FMI es David Vogel.
Frente a la crisis sanitaria y económica social ocasionada por el COVID-19, el BID ha otorgado a Uruguay diversos y cuantiosos apoyos. Al respecto, el director del BID Uruguay, Santiago Cat Ruprecht, señaló:
«En el curso del 2020, frente a la crisis sanitaria y económica social ocasionada por el COVID-19, el BID ha aprobado U$S 555 millones en préstamos al Gobierno de Uruguay con garantía soberana (está previsto aprobar una operación adicional por U$S 106 millones), y U$S 125 millones de apoyo al Sector Privado a través del BID Invest. Se han dado, además, otros apoyos a emprendedores y se han ejecutado diversos estudios técnicos de cara a futuras inversiones y programas de desarrollo».
Por su parte, el Banco Mundial está compuesto por cinco instituciones: el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), la Asociación Internacional de Fomento, la Corporación Financiera Internacional, el Organismo Mulilateral de Garantía de Inversiones y el Centro Internacional de arreglo de diferencias relativas a inversiones.
En sus últimos informes, Uruguay está calificado como un país con renta promedio alta, con un 60 por ciento de su población dentro de la clase media y alto acceso a la educación.
La estabilidad institucional, el buen ambiente para hacer negocios y la baja corrupción son también características destacadas, así como la importante reducción de la pobreza entre los años 2006 y 2017, que llevó los porcentajes de 32.5 a 7.95 por ciento.
Uruguay ingresó a esta organización en 1946 y pidió su primer préstamo en 1950. Para 2021, la presidenta del Comité de Desarrollo del grupo del Banco Mundial será Azucena Arbeleche, actual Ministra de Economía y Finanzas del país, siendo la primera vez que Uruguay accede a este puesto.
Por último, el archiconocido -al menos de nombre- Fondo Monetario Internacional (FMI) fundado tras los acuerdos de Bretton Woods, en las afueras de Washington DC, tiene como función “promover la cooperación monetaria internacional, el comercio internacional, reducir la desocupación, conseguir tasas de cambio sustentables, lograr el crecimiento económico y otorgar préstamos a los países miembros que se encuentren en problemas financieros”.
En sus últimos reportes, el FMI ha señalado que Uruguay se encuentra en una «situación envidiable«: altos ingresos per cápita y bajos niveles de pobreza. Subraya que en el país «hay estabilidad política, gestión de gobierno e instituciones sólidas y un alto grado de cohesión social gracias una década y media de vigoroso crecimiento».
Estos organismos, así como el gobierno estadounidense, tienen una importante relación con la Embajada de Uruguay, la máxima representación y autoridad del país en Estados Unidos.
Además de su tarea de relación política con el gobierno estadounidense y los organismos internacionales, la Embajada cuenta con un Consulado que se ocupa de las necesidades de los ciudadanos uruguayos residentes o visitantes en los Estados Unidos.
El presidente Luis Lacalle Pou acaba de nombrar para este puesto clave al abogado Andrés Durán Hareau, que aunque no proviene de la carrera diplomática, cuenta con un relevante curriculum profesional, incluidos estudios de posgrado en el país donde ahora ejerce su nueva función, y, por sobre todo, la máxima confianza del propio Presidente.
Palabra de embajador
«Punta del Este es un lugar cada vez más reconocido por los estadounidenses, principalmente como destino de vacaciones durante los meses de diciembre a marzo. El público americano aprecia la naturaleza increíble del lugar, la seguridad, la calidez de la gente uruguaya, y el nivel de los servicios y actividades que ofrece», asegura el embajador Andrés Durán Hareau en una charla exclusiva con Punta del este Internacional.
Para el diplomático, los estadounidenses están comenzando a relacionarse de una manera muy directa con la península.
«Algunos prefieren visitarla en épocas más tranquilas, otros en los períodos pico de fin de año y enero. Punta del Este tiene momentos y lugares para todos los perfiles. Por otro lado, últimamente, se ha convertido en un lugar atractivo para cierto público, sobre todo de alto poder adquisitivo, para establecerse o vivir gran parte del año. Y creo que esta tendencia irá en aumento. La infraestructura de Punta del Este y las alternativas que ofrece mejoran año tras año, por ejemplo, en materia educativa y en salud. Eso lo vuelve un sitio cada vez más valorado», dice.
Andrés Durán Hareau no escapa tampoco a explicar la coyuntura y las ventajas de Punta del Este con respecto a la situación en otras partes del mundo.
«En este contexto de pandemia, Uruguay en general ha sido reconocido internacionalmente como uno de los lugares más seguros y atractivos del mundo. Desde la Embajada notamos un gran interés por nuestro país y buscamos promoverlo en todos los ámbitos posibles. Nuestro régimen legal y tributario es también muy amigable con el extranjero», afirma.
Además de estos puntos salientes, el Embajador señala la muy buena logística que ha implementado el país.
«La conectividad área directa entre Estados Unidos y Uruguay es importante para lograr un flujo constante de visitantes. Y, afortunadamente, ya se están retomando los vuelos desde Miami. Esto es clave para mantener esa frecuencia», indica.
Y para finalizar, agrega:
«Somos afortunados de tener un lugar como Punta del Este, tenemos que cuidarlo y seguir mejorándolo. Somos optimistas en cuanto a su futuro».
