Mas allá de sus paisajes naturales y su imperdible oferta turística, Punta del Este se presenta al mundo como una ciudad de intensa vida cultura para que diversas comunidades rindan libre culto a su religión.
En medio de un contexto mundial conflictivo, donde grandes civilizaciones del mundo se enfrentan con armas de guerra en nombre de Dios, Uruguay es un país abierto a la paz y a las distintas prácticas étnicas ofreciendo respeto y libertad religiosa para todos.
Un 2 de febrero de 1516, Juan Díaz de Solís fue el primer español en llegar al puerto de Punta del Este. Lo llamó Puerto de la Candelaria por ser el día de esa virgen, y así fue nombrada patrona de este balneario.
La laicidad es, sin dudas, uno de los mayores atractivos de nuestra sociedad en tiempos donde la libertad de pensamiento es un bien preciado que da valor a una cultura abierta a toda pluralidad religiosa. Punta del Este es el máximo exponente de esta diversidad y tranquilidad donde confluyen iglesias, templos y rituales que dan lugar a las distintas creencias de residentes y extranjeros: católicos, cristianos, afro-umbandistas, judíos, metodistas, luteranos, evangélicos, pentecostales, ortodoxos del Rito Oriental, practicantes de la Ciencia Cristiana, Testigos de Jehová y musulmanes, entre otros, conviven en nuestras tierras con la bendición de poder celebrar su cultura de forma libre y respetuosa. Punta del Este se convierte así en uno de los principales destinos de la región que concentra la mayor variedad de prácticas religiosas, recibiendo la visita multiétnica de miles de turistas que cada año son bien recibidos en un espacio que respeta la libertad de culto, y ofrece la posibilidad de conocer estructuras y rituales que adhieren a las distintas creencias y culturas. La Iglesia de la Candelaria es el templo católico más importante de península. Se levantó cerca del faro en 1911 y es el punto de encuentro entre fieles religiosos durante todo el año.
En su fachada impacta el color celeste y la imagen de la Virgen de la Candelaria que provino de España. Cada 2 de febrero, Punta del Este conmemora el día de su virgen patrona con una tradicional procesión náutica, exposiciones históricas y números artísticos en el puerto.
En sincretismo con esta festividad católica, también se rinde culto umbandista a lemanjá, diosa del mar de reminiscencias africanas a la que toda una comunidad presta ofrenda en demanda de prosperidad, salud y amor. lemanjá se ha convertido con el paso del tiempo en una fiesta popular de tradición uruguaya celebrada en las aguas de los océanos, mares y ríos del país. Al ritmo de tambores y campanas, miles de devotos de la religión umbandista, curiosos y turistas son testigos de un ritual en el que puede verse a personas vestidas de blanco o celeste, adornadas con collares y pulseras, y pronunciando cánticos incesantes. Al norte del departamento de Maldonado, en medio de las sierras de Minas se encuentra el Templo Budista, a 400 metros de altura y una vista privilegiada que invita a la reflexión frente a la inmensa naturaleza.
Con arquitectura originaria de tierras lejanas con diseño estilo tibetano y butanés oriental, este espacio es dedicado a la enseñanza del budismo en español en toda Latinoamérica. Pies descalzos, celulares apagados y silencio, completan una atmósfera de retiro espiritual para conectarse con los principios de la filosofía budista.
La religión judía también tiene gran presencia en la ciudad, que al día de hoy cuenta con la presencia de seis sinagogas, entre las que se destacan el Templo Rafael, el Beit Yaacov y el Adjut Israel. La vida cultural judía en el balneario es cada vez más prolí-fica, siendo impulsada por una comunidad de visitantes y residentes que lo adoptan como un destino ideal para continuar con su tradición.
