Debido al uso de pantallas principalmente, también de lentes de contacto y a los factores externos que van desde el viento hasta los aires acondicionados, el síndrome del ojo seco se ha vuelto más común de lo que se piensa. Hasta ahora, los tratamientos solo aliviaban los síntomas pero el nuevo tratamiento con Rexon-eye recupera la función normal de los órganos y restituye la película lagrimal. La doctora especialista en diagnóstico y tratamiento de ojo seco, María José Dávalos y el reconocido oftalmólogo José Arrieta, explican las maneras de solucionar este tipo de problemas visuales.
Es mucho más común de lo que se cree. Y más en estos tiempos de pantallas -de teléfono, de computadora, de tablet-. El síndrome del ojo seco es el final de muchas patologías que afectan a la superficie ocular. Una alteración -en cantidad y calidad- de la película lagrimal. Por otra parte, vale aclarar que la película lagrimal es el primer elemento óptico del ojo. En términos generales, puede ser alteración de una o más capas de la película lagrimal. «Las glándulas se van atrofiando con el tiempo porque frente a las pantallas se pestañea menos veces. De este modo, se evapora la película lagrimal. Y se expone más. A las pantallas, por supuesto, hay que sumarle los factores externos que van desde el viento hasta el aire acondicionado», afirma la doctora María José Dávalos, especialista en el tratamiento del ojo seco, en el Instituto Arrieta Visión.
Hasta ahora, los tratamientos ayudaban a que el ojo funcionara mejor. Pero el tratamiento con Rexon-eye, regenera la glándulas. Lo que hace es una Resonancia Molecular Cuántica (QMR, por su sigla en inglés) que, a partir de la frecuencia eléctrica entre célula y célula logra despertarlas, regenerando las glándulas y células.
Los estímulos eléctricosnormalmente son generados por el propio cuerpo, pero también pueden ser generados artificialmente y aplicados por instrumentos biomédicos adecuadamente diseñados. La principal dificultad de esta estimulación artificial es crear las señales correctas, capaces de interactuar con el organismo estimulando los procesos deregeneración natural. Y eso es lo que ha logradoRexon-eye.
«En varios síndromes y enfermedades oftálmicas, la situación patológica se crea por el mal funcionamiento de células y tejidos específicos, como la glándula lagrimal y las glándulas de Meibomio en el caso del ojo seco. Al estimular el metabolismo y la regeneración natural de estas células con el tratamiento deresonancia molecular cuántica, se puede reactivar su correcto comportamiento fisiológico y restaurar una situación saludable en los pacientes», dice Dávalos.
Otro de los casos típicos de ojo seco es una especie de «caspita» en las pestañas. Esto es debido a un parásito, el Demodex folicullorum, que se alimenta de la grasa del folículo piloso de las pestañas y que se reproduce sin parar. Lo que suele provocar es conjuntivitis crónica, bordes palpebrales con secreción permanente y disconfort visual que se conoce como Blefaritis. Una vez detectado el parásito en una pestaña, se trata específicamente con un anti parasitario y el lavado periódico del borde de la pestaña.
Para este tipo de síntomas, la empresa Resono Ophthalmic, creada en 2014, desarrolló el dispositivo Rexon-Eye que consiste en un generador QMR equipado con un electrodo especial en forma de máscara, para aplicar de manera óptima el tratamiento en el área de la superficie ocular. Este dispositivo fue lanzado en el mercado oftálmico en 2018 como herramienta terapéutica.
A diferencia de otros dispositivos del mercado, que simplemente producen un calentamiento de la zona tratada y por tanto solo alivian los síntomas de la enfermedad, Rexon-Eye aplica un tratamiento capaz de estimular la recuperación de la función normal de los órganos implicados.
Durante el tratamiento, los pacientes experimentan solo una suave y agradable sensación de calor en el área de la piel debajo de la máscara. En algunos pacientes, la presión de la máscara sobre los párpados puede provocar una visión borrosa temporal al final del tratamiento, que desaparece espontáneamente en unos minutos. El protocolo de tratamiento actual prevé sesiones de 20 minutos, con una alternancia de 30 segundos entre los dos ojos, una sesión por semana durante un período total de 4 semanas.
«Los síntomas del ojo seco son muy variados. Los más comunes son el ojo rojo, visión borrosa transitoria, ardor picazón, sensación de cuerpo extraño o arenilla en los ojos, sensibilidad aumentada a la luz e inclusive lagrimeo», indica el doctor José Arrieta, un oftalmólogo de renombre internacional y dueño de Arrieta Visión que queda en Recoleta, Buenos Aires. Para Arrieta, esta circunstancia es muy común en la población en general. «Antes lo veíamos casi exclusivamente en mayores de 40 años. Sin embargo, actualmente, con los cambios en el estilo de vida y el uso intensivo de los dispositivos electrónicos lo podemos observar en poblaciones cada vez más jóvenes, incluso en adolescentes», asegura.
El Rexon-Eye es, en realidad, el mejor tratamiento posible para el síndrome de ojo seco. Y con media hora por semana, durante un mes, se puede mejorar notablemente el estado de la visión de una persona. Además, recupera y regenera las estructuras (glándulas) productoras de la Película Lagrimal.
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Dr. José Arrieta MN: 127.779