En lo que fue el vivero de Antonio Lussich, se abre esta novedosa propuesta de arte, naturaleza y diseño. En Agapanthus, creado y pensado por Mónica Kursner, habrá muestras de pinturas, esculturas y exhibición de moda de manera permanente. A los pintores y escultores invitados, se agregan los diseños de sombreros y bolsos de piezas únicas handmade por Kursner quien, a través de su marca KMK, quiere acercar la moda del sur de Francia a Punta del Este.
Dar vida a un proyecto siempre es arduo, complejo. Supone tiempo y desafíos constantes. Pero si en ese esfuerzo se pone pasión es, al mismo tiempo, un acto de amor y se traduce como infinito placer. Agapanthus cumple, justamente, con estas premisas. En lo que fue el vivero de Lussich, se abre esta nueva propuesta que engloba naturaleza y arte. Porque en medio de plantas y árboles únicos -papirus, alcornoques, magnolias- y pegado al actual Arboreto Lussich, se abre este novedoso proyecto ideado por Mónica Kursner: un espacio donde se presentarán muestras de pinturas, esculturas y, además, se exhibirán y venderán las creaciones de moda de la propietaria.
“Agapanthus va a ser un salón de exhibición, de eventos y un espacio cultural. El lugar tiene 60 hectáreas pero vamos a utilizar sólo la zona de la casa y sus alrededores. Allí habrá, además de cuadros y esculturas, una muestra permanente de mis creaciones: bolsos de playa estilo Saint Tropez y sombreros muy a la moda del sur de Francia”, comenta Kursner y agrega: “quiero traer esa moda a Punta del Este”.
“Un lugar donde se pueda compartir el arte y la naturaleza, donde sea posible apreciar el diseño y las nuevas tendencias”
La idea de Agapanthus, cuenta Mónica, nació hace un año en Francia. Su línea de carteras tiene distintas procedencias: “Algunas vienen de Indonesia, después tengo otras que vienen de Francia y algunas que vienen de España. Los sombreros vienen de Argentina y Asia. A cada una de mis piezas les hago el acabado final y el diseño”, comenta. Su marca se llama KMK.
Los bolsos y sombreros de Kursner son piezas únicas con plumas y brillos de todos los colores. “Se trata de ediciones limitadas, ninguno se repite ni en los colores ni en sus formas. Los sombreros, además, se pueden guardar en la valija y cuidan el peinado”, dice.
Mónica nació en Argentina pero hace 28 años que vive en Ginebra, Suiza, junto a su esposo. Y hace 16 que compró su casa en Punta del Este, donde pasa 6 meses todos los años. Amante de los animales -tiene 36 perros de la calle y 27 gatos- en su casa esteña conviven caballos, gansos, pavos reales, vacas y un ciervo. Además, posee una colección importante de piezas de arte precolombino y otra colección de piezas de arte griego.
Dedicada con pasión a su nuevo proyecto, espera “acercar la moda del sur de Francia a Punta del Este”. Agapanthus será el lugar donde realizará su nuevo sueño a partir de este enero. “Un lugar donde se pueda compartir el arte y la naturaleza, donde sea posible apreciar el diseño y las nuevas tendencias. En un futuro, se realizarán tardes de tartulia con los músicos y cantantes del Sodre”, asegura. Por eso, Agapanthus será un hecho artístico. O, en palabras de Herman Hesse, “la contemplación del mundo en estado de gracia”.
Instagram:
@agapanthus_espacioartecultural | @kmk__official_
